¿Cómo tomar decisiones?

Tomar decisiones, ya sean simples o complejas, puede ser un desafío. A continuación, se presentan estrategias para manejar ambos tipos de elecciones de manera eficiente y efectiva.

Decisiones fáciles

Las decisiones triviales pueden resolverse rápidamente, incluso de forma automática. Aquí hay algunas pautas clave para abordarlas:

Conserva tu energía mental:
La capacidad de tomar decisiones se agota con el tiempo. Reservar tu energía para elecciones significativas te permitirá enfrentar los desafíos complejos con mayor claridad.

Evita pensar demasiado:
Reflexionar en exceso puede llevar a un bucle de maximización, donde buscas interminablemente la mejor opción sin sentirte nunca satisfecho porque siempre crees que hay una alternativa superior.

Confía en tu decisión una vez tomada:
Después de elegir, nuestro cerebro tiende a justificar que fue la opción correcta. Esta racionalización libera espacio mental para otras tareas más importantes.

Decisiones complejas

Para tomar decisiones complejas, es útil utilizar un marco estructurado que combine lógica y valores personales, como el Análisis de decisiones basado en criterios ponderados. Este método ayuda a evaluar opciones de manera objetiva y priorizar lo que realmente importa.

Primero, define claramente el problema que necesitas resolver. Por ejemplo: «¿Debería aceptar una nueva oferta de trabajo o quedarme en mi posición actual?» Luego, identifica todas las alternativas disponibles, como aceptar la nueva oferta, permanecer en el puesto actual o buscar otras oportunidades.

El siguiente paso es establecer los criterios que son importantes para tomar la decisión. Estos pueden incluir factores como el salario, el crecimiento profesional, la estabilidad laboral, el balance vida-trabajo y la cultura organizacional.

Una vez definidos los criterios, asigna una ponderación a cada uno en función de su importancia relativa, asegurándote de que la suma total sea del 100%. Por ejemplo, podrías asignar un 30% al salario, un 25% al crecimiento profesional, un 20% a la estabilidad laboral, un 15% al balance vida-trabajo y un 10% a la cultura organizacional.

A continuación, evalúa cada opción calificándola en una escala (por ejemplo, del 1 al 10) para cada criterio. Multiplica cada calificación por su peso y suma los resultados para obtener una puntuación final por cada alternativa. Por ejemplo:

CriterioPonderaciónOpción 1 (Nueva oferta)Opción 2 (Puesto actual)Opción 3 (Buscar otras opciones)
Salario30%8 (2.4)6 (1.8)7 (2.1)
Crecimiento profesional25%9 (2.25)5 (1.25)8 (2.0)
Estabilidad laboral20%6 (1.2)8 (1.6)7 (1.4)
Balance vida-trabajo15%7 (1.05)9 (1.35)6 (0.9)
Cultura organizacional10%8 (0.8)7 (0.7)8 (0.8)
Total100%7.76.77.2

Finalmente, toma la decisión eligiendo la opción con la puntuación más alta. También puedes ajustar el resultado si factores intangibles, como emociones o intuición, juegan un papel importante en tu proceso de decisión.

Coacheame
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible.

La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudarnos a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.

Nunca almacenamos información personal.

Tienes toda la información sobre privacidad, derechos legales y cookies en nuestra página de privacidad y cookies.